Tabasco desde mediados del siglo pasado, se convirtió poco a poco en el epicentro de las actividades propias de la industria de hidrocarburos, debido a la gran riqueza que habita en el subsuelo y la privilegiada ubicación geográfica que permitieron durante muchos años financiar el desarrollo nacional y convertirlo en un área estratégica de la economía mexicana. Como referencia, para 1979 se llegaron a extraer más de un millón de barriles diarios de esta tierra, llegando a representar aproximadamente el 75% de la producción nacional.

Desafortunadamente, esa época de bonanza no se reflejó en mejores condiciones para nuestra entidad, ni vino acompañado de estrategias a nivel gubernamental que incidieran de manera favorable en el crecimiento económico de la población, sino en caso contrario, trajo consigo aumento en la inflación, impactos negativos en las actividades productivas y afectaciones en las comunidades que fueron origen de grandes movimientos sociales, viendo pasar los beneficios de estas inversiones para las empresas y personal foráneo que venía a ejecutar los trabajos. En palabras propias del Lic. Andrés Manuel López Obrador, paradójicamente se convirtió en un estado rico con pueblo pobre.

Hoy a casi 5 años del inicio de la Cuarta Transformación en Tabasco, alineados a la visión estratégica del Presidente Andrés Manuel López Obrador, de recuperar la Soberanía Energética Nacional, podemos destacar que desde el inicio de la administración del entonces Gobernador Lic. Adán Augusto López Hernández, se consideró pertinente atender de manera integral los temas del sector energético, buscando establecer un cambio de paradigma en esta relación, procurando la armonización entre las actividades de la industria y las comunidades, en la cual el aprovechamiento de las capacidades locales existentes es parte fundamental para maximizar los beneficios de las inversiones a favor de las y los tabasqueños.

En este contexto, la Secretaría para el Desarrollo Energético ha puesto especial interés en tres aspectos claves para alcanzar este objetivo. El primero de ellos tiene que ver con el fortalecimiento de (fortalece las) competencias de los estudiantes y profesionistas locales de acuerdo con las especialidades que está requiriendo la industria. Para ello se ha trabajado en conjunto con todas las Instituciones de Educación Superior de Tabasco que cuentan con carreras relacionadas al sector y diversas empresas nacionales e internacionales, implementando cursos de capacitación especializada de manera gratuita a través de convocatorias públicas, permitiendo beneficiar de manera directa a más de 1,100 ingenieros tabasqueños, en su mayoría jóvenes.

Otra parte de los esfuerzos orientados en este sentido, ha sido la gestión ante compañías operadoras para aterrizar inversiones alineadas a la transferencia de tecnología en 3 Universidades Públicas para el establecimiento y equipamiento de laboratorios especializados en temas del sector energético, beneficiando a poco más de 900 estudiantes directos, adicional a las futuras generaciones que se incorporen a esta matricula.

El segundo punto ha sido mejorar las oportunidades de inserción de los profesionistas con la industria, lo cual ha sido posible gracias a la voluntad y disposición de muchas empresas para brindar espacios a jóvenes desde su etapa universitaria permitiéndoles adquirir experiencia acorde a sus áreas de estudio. Esto a través de un programa de vinculación donde se brindan facilidades para que los estudiantes próximos a egresar puedan realizar estancias de hasta 1,000 horas en las empresas especializadas en actividades del sector energético, con más de 350 casos de éxito.

El tercero, pero no menos importante, son las oportunidades para las pymes de Tabasco que brindan bienes y servicios a la industria, toda vez que son ellas las principales captadoras de jóvenes y profesionistas locales en la medida que se les brindan oportunidades de negocio. Por lo cual se han realizado esfuerzos importantes, en primera instancia, para conformar un padrón público de proveedores locales que hemos denominado “Plataforma Proveedores de la Energía”, misma que está al alcance de toda aquella compañía nacional o internacional que requiera ubicar algún tipo de bien o servicio, en la que a escasos año y medio de su lanzamiento cuenta con más de 210 empresas registradas. Adicionalmente en este rubro, es de destacar el apoyo del Gobernador del Estado, como principal promotor de las capacidades del empresariado local, incentivando que las empresas que tienen a cargo grandes proyectos en el sector, socialicen los tiempos, necesidades y requisitos de contratación con miras a generar una mayor participación de estos en la cadena de valor, dejando así, una mayor derrama para nuestro estado.

Estas y otras acciones impulsadas por la Lic. María Luisa Somellera, Titular de la SEDENER, como las realizadas en materia de concertación, desarrollo comunitario y transición energética, han permitido consolidar esta dependencia como referente de entidades locales en el sector, por la capacidad de entendimiento y articulación con los distintos actores, así como por la implementación de políticas públicas de beneficio para las comunidades y sectores productivos.

En la Secretaría para el Desarrollo Energético se tiene claridad de que el principal activo y recurso que tenemos en Tabasco no está en el subsuelo, sino en nuestra gente. En las y los jóvenes, estudiantes, profesionistas y empresarios que día a día buscan dar lo mejor de sí en cada oportunidad que se les presenta. Es por esto que tenemos el firme compromiso de continuar trabajando para generar beneficios tangibles en favor de las y los ciudadanos.

Pablo Jiménez Pons

Subsecretario de Planeación y Vinculación · Secretaría para el Desarrollo Energético de Tabasco.

@pjimenezpons

Por Alfredo Álvarez Ramírez.

Desde hace algunos años, el Sujeto Colectivo de Transformación en la Transición Agroecológica en Colima se llama Frente en Defensa del Maíz, y es que hay varios elementos para afirmarlo, el colectivo el cual inició su proceso de conformación desde el año 2013 ha dado numerosas batallas en defensa del maíz y el territorio.

Como integrante fundador me permito visibilizar algunas de las luchas en las cuales se ha participado como colectivo a lo largo de los años, en un inicio surgimos para detener la siembra experimental de maíz transgénico en nuestro país, por parte del entonces presidente Felipe Calderón Hinojosa, replicando con ello la visión neoliberal de convertir todo en mercancía, incluso nuestro grano sagrado, el maíz, del cual nuestros abuelos y abuelas domesticaron por cerca de 9,000 años, heredándonos 64 variedades de maíz en el territorio nacional.

Dicha batalla jurídica se ganó al lograr la aprobación de la Ley Estatal de Fomento y Protección del Maíz Nativo en Colima, en el año 2019, logrando declarar el maíz como Patrimonio Alimentario del Estado de Colima, sirviendo a su vez de ejemplo para la aprobación de dicha iniciativa a nivel federal. Es de rescatar la organización colectiva divulgativa realizada por el colectivo Frente en Defensa del Maíz, realizando hasta ahora 10 festivales en defensa del maíz, cada Dia Del Maíz, 29 de septiembre de cada año, además reconocer la voluntad y compromiso de la gobernadora Indira Vizcaino Silva, Colima es la primera entidad en contar con Reglamento que le da operatividad a la protección de esa planta bendita. Lo anterior es relevante, ya que evidencia la voluntad política por proteger nuestro maíz, ya que en el gobierno anterior del priista José Ignacio Peralta Sánchez, por más de un año resultó omiso y renuente en aprobar el Reglamento.

Otro campo en defensa del territorio del colectivo ha sido la defensa del territorio ante el despojo neoliberal a través de las concesiones mineras, las cuales son entregadas hasta por 100 años, en Colima, los neoliberales concesionaron el 44% del territorio a la minería, por ello surgió la resistencia en las comunidades de Zacualpan y Canoas, dando ejemplo de dignidad en defensa de la vida. Además, le apostamos a la unión dentro de la comunidad de Zacualpan con la creación del Primer Festival de la Ciruela, buscando remendar el tejido social y reconocer la comunidad y su herencia milenaria cultural como pueblo originario, lo cual sucedió, uniéndose los dos dirigentes de la comunidad para lograr un masivo evento sin incidentes y en beneficio de la comunidad originaria.

Al llegar la pandemia el colectivo entró en un debate, frente al quedarnos o no en casa, decidimos comenzar a sembrar nuestros propios alimentos, de ahí surgen las Comunidades Urbanas de Aprendizaje Campesino, las CUACs son espacios públicos ociosos que son rescatados por los vecinos para comenzar primeramente a sembrar alimentos agroecológicos, es decir libres de agrotóxicos, siendo el detonante para generar otros procesos como la economía social y solidaria con la instalación de fogones, además de la instalación del gallinero comunitario, el CUAC a su vez funciona como un espacio para generar conciencia ambiental al reciclar los pets de los hogares, además de composta mediante la recuperación de los residuos orgánicos los hogares, actualmente existen ocho en los municipios de Villa de Álvarez y Colima, ubicados en las colonias, Gustavo Vázquez, Mirador de la Cumbre, Nuevo Milenio, Bosques del Sur, Infonavit, Tabachines, el Porvenir y Carlos de la Madrid. Como se ve, las CUACs se convierten en la practica en escuelas campesinas para generar dialogo de saberes en torno a las practicas agroecológicas y promotores permanentes de la transición agroecológica desde los territorios y a su vez en detonantes de procesos comunitarios como es la economía social y solidaria.

En la zona rural el colectivo aplica la agroecología en la parcela llamada “La Utopía, donde Don Melchor la vuelve realidad”, ubicada en la comunidad de los Asmoles, Colima, desde hace cuatro años inició el proceso de transición agroecológica logrando importantes avances al grado de convertirse en modelo agroecológico estatal, sirviendo de ejemplo para desde la utopía celebrar diversos talleres para demostrar como sí es posible la agroecología mediante el manejo sostenible.

Por su parte, en el eje legislativo el Frente en Defensa del Maíz ha sido un protagonista imprescindible en la construcción de la Ley para la Promoción y Desarrollo Agroecológico para el estado de Colima, la primera del país, fruto de recorrer por cinco meses los diez municipios que conforman nuestra Colima. Acompañaron todo el proceso de construcción de la Ley, desde el pasado 7 de mayo del año 2022 en el desarrollo y elaboración de los parlamentos abiertos en todo el territorio de la entidad con el objetivo de escuchar el sentipensar de los diversos actores rurales del estado, hasta su cierre, en la capital el día 10 de septiembre del 2022, durante dichos foros se contó con la asistencia y mensaje de diferentes referentes nacionales como es el Dr. Armando Bartra, la Dra. Adelita Sanvicente y el camarada Jesús Ramírez Cuevas, además decenas de reuniones inter institucionales, a las cuales agradecemos su apoyo como son la Dra. María Elena Álvarez-Buylla de CONAHCYT, al Ing. Víctor Suarez de SADER, a la Mtra. María Luisa Albores de SEMARNAT y a Luis Hernández de la Procuraduría Agraria, de esa manera, mediante ese masivo dialogo de saberes como nos enseña el presidente Andrés Manuel López Obrador, dándole vuelta a la tortilla, desde ahí, surgió la Ley Agroecológica, del Pueblo y para el Pueblo, por eso el pasado 8 de junio del 2023 es ya una realidad, dicha Ley solo es el primer paso para generar otros procesos, como es la planeación y construcción de la primera biofabrica estatal generadora de bioinsumos agroecológicos, idea del profesor Arnoldo Vizcaino, desde la entidad con menor cantidad de habitantes seguimos haciendo historia.

En la lucha de los Pueblos, nadie se cansa.

Abierto al dialogo de saberes twitter: alfred_alva