Ahora que se ha aprobado la desaparición del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai), la oposición se rasga las vestiduras defendiendo al organismo como garante de la información en favor de los ciudadanos.

En la realidad, el Inai estaba muy lejos de ser eso, estando al servicio de unos cuántos y recurriendo a excesos y despilfarros, como cuando se dio a conocer, hace un año, que el ex comisionado Óscar Guerra Ford, había usado recursos públicos para pagar una cuenta de 20 mil pesos en un table dance.

El escándalo

En noviembre de 2023 el portal Contralínea publicó una investigación en la que detallaba cómo en 2014, el entonces comisionado Óscar Guerra Ford, había usado una tarjeta corporativa del Inai para pagar tres cuentas por un monto total de 20 mil 411 pesos en el table dance Curazao, es decir, lo pagó con dinero público.

Para cuando surgió la investigación, Guerra Ford ya había terminado su encargo en el Inai y había sido nombrado secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Transparencia (SNT), cargo al que tuvo que renunciar días después.

El Inai ocultó la información

Pese a que la razón de ser del organismo era la transparencia, el acceso a la información y la máxima publicidad, el Inai censuró los detalles de un total de 94 gastos que Guerra Ford hizo con dicha tarjeta corporativa, donde se incluyen las 3 cuentas en el table dance.

El pleno del Inai argumentó que publicar esa información supondría revelar la capacidad adquisitiva del entonces comisionado puesto que, según informaron, Óscar Guerra devolvió de su dinero lo gastado en dicha tarjeta, solventando el tema.

Curazao fue clausurado por delito de trata

El table dance Curazao, que el mismo ex comisionado aceptó haber visitado para una cena con compañeros de trabajo, fue noticia a finales de 2018 cuando 19 personas víctimas de trata fueron rescatadas del lugar, donde se detuvo al gerente y una docena de empleados.

La fiscalía de la Ciudad de México detalló en su momento que las mujeres eran contratadas como bailarinas y después obligadas a prostituirse.

La renuncia de Guerra Ford

Días después de que se publicaran lo detalles del caso, Óscar Guerra renunció a su cargo como secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Transparencia (SNT), al igual que Rosendoevgueni Monterrey quien fungía como secretario Ejecutivo del Inai, y que era comisionado del organismo cuando sucedieron los hechos en 2014.

El Órgano Interno de Control (OIC) del Inai inició una investigación sobre los gastos personales realizados por Ford Guerra con la tarjeta corporativa.

Óscar Guerra Ford reconoció “como un error el haber utilizado la tarjeta equivocada”, pero siempre sostuvo que nunca hubo un daño patrimonial al organismo puesto que reembolsó los montos de sus gastos personales.

Abogados consultados por Contralínea declararon en la investigación que el uso que se le dio a la tarjeta podría enmarcarse en el delito de peculado o uso indebido del dinero público, aunque se haya reparado el daño.